Una simfonía de 20 complicaciones

Tomado en el contexto de la historia de Patek Philippe, este es un evento muy importante. Los nuevos Patek Philippe Grandmaster Chime Ref. 6300 simplemente han desbancado al famoso Sky Moon Tourbillon Ref. 6002 para llevarse el título del más complicado reloj de pulsera en la corriente colección del relojero de Ginebra. Eso es usando el concepto de «corriente» en su sentido más amplio posible, ya que la extrema complejidad del reloj dicta una producción anual muy limitada, lo que significa que el Patek Philippe Grandmaster Chime Ref. 6300 seguirá siendo en efecto un reloj muy raro. También será muy buscado, ya que representa la culminación de la larga e ilustre historia de Patek Philippe y su imperecedera historia de amor con los relojes de sonería - una historia que se remonta a más de 175 años.

 MAESTRÍA DEL SONIDO

El movimiento del Patek Philippe Grandmaster Chime Ref. 6300 comprende 1.366 componentes, además de otros 214 en su caja reversible. Cuenta con 20 complicaciones (véase la lista anterior), incluyendo cinco funciones diferentes de sonería. Estas cinco funciones cuentan toda la historia del paciente dominio de Patek Philippe de las complicaciones del sonido en toda su riqueza, complejidad y potencial mecánico.

Por desgracia, está más allá del alcance de este artículo entrar en detalles acerca de la «conquista» de la relojería del sonido (un maravilloso libro titulado Répétitions Minutes, publicado por Patek Philippe, le cuenta todo lo que necesita saber). Vamos simplemente decir que la historia comenzó el 4 de septiembre de 1839, apenas cinco meses después de que la empresa se hubiera creado, cuando una suma de dinero fue cambiada por un reloj de bolsillo con un repetidor de cuartos. Fue el 19º reloj realizado por la empresa en ciernes, a la que probablemente llamaríamos una «startup» en la actualidad. Desde ese momento en adelante, la historia de los relojes de sonería y la historia del relojero de Ginebra estarían siempre unidas. Desde su primer repetidor de minutos, que fue vendido en 1845, y a lo largo de los próximos 60 años, en Patek Philippe producirían muchas variaciones en el tema de los repetidores, combinándolos con toda clase de complicaciones: calendarios perpetuos, cronógrafos flyback, husos horarios, ecuación del tiempo, etc. A través de este proceso, la búsqueda de movimientos y componentes cada vez más pequeños llevaron a la creación del primer reloj repetidor de pulsera, un repetidor de cinco minutos para damas creado en 1916. Desde 1925 los repetidores de minutos se unieron a la compañía y fueron saliendo normalmente sin dejar de ser algo excepcional, ya que la producción no superó nunca las decenas de unidades.

El primer reloj de pulsera que contaba con un repetidor de minutos en combinación con otras complicaciones - en este caso un calendario perpetuo con ventanas, aguja indicadora de la fecha y fase lunar - data de 1939. Hasta la década de 1960, cuando la demanda lamentablemente comenzó a declinar, fueron producidos una treintena de repetidores de minutos. En los años 80, sin embargo, Philippe Stern, que tenía la corazonada que la relojería mecánica excepcional debería hacer una reaparición, autorizó la producción de dos repetidores de minutos con complicaciones, usando dos troquelados antiguos de la Vallée de Joux ( Patek Philippe tradicionalmente acababa y ensamblaba movimientos troquelados de otros proveedores). A pesar de que fueron los últimos en ser hechos de esta manera, efectivamente marcaron el comienzo de una nueva era. Esta nueva era, de la cual el Patek Philippe Grandmaster Chime Ref. 6300 forma parte, estuvo simbólicamente marcada por el famoso Calibre 89, fabricado para celebrar el 150 aniversario de la compañía en 1989. Para producir esta pieza excepcional, un laboratorio de investigación y desarrollo de acústica se estableció prácticamente desde cero, y daría lugar al nacimiento de una nueva generación de relojes de sonería. Las 33 complicaciones del calibre 89 incluyen un repetidor de minutos, una Grande Sonnerie y una Petite Sonnerie. Este logro fenomenal fue seguido rápidamente con un repetidor de minutos automático ultra-fino con un micro-rotor patentado, y una versión automática con calendario perpetuo, ambos realizados con la mayor parte de los avances técnicos que se habían hecho para el calibre 89, y que también se lanzaron como parte de la las celebraciones del 150 aniversario. Una nueva generación de relojes de pulsera de sonería verían la luz del día, culminando hoy con el Patek Philippe Grandmaster Chime Ref. 6300.

 MEJORAS DECISIVAS

Esta nueva generación de relojes de pulsera de sonería no hubiera visto la luz del día sin la investigación llevada a cabo en la búsqueda del calibre 89. Por primera vez, los relojeros puros fueron apoyados por los ingenieros. El taller especialmente creado se puso a trabajar de inmediato para resolver ciertos «problemas» técnicos que hasta entonces había sido algo descuidados. Una de esas cuestiones era el zumbido bastante desagradable que a veces detraía el tono del gong. Este ruido de fondo era un efecto secundario mecánico generado en el interior del sistema de regulación del escape del mecanismo de retroceso del gong. Se hicieron algunos intentos fijándose de nuevo en siglo XIX, pero el problema nunca fue realmente resuelto. Los ingenieros de Patek Philippe desarrollaron una solución mediante el uso de un volante completamente silencioso que se abría y cerraba dependiendo e la velocidad, regulando así el ritmo y la duración del campaneo. Los tonos puros finalmente pudieron apreciarse por completo, sin ninguna interferencia.

Otra mejora notable, y que marcó una ruptura con la tradición, fue el diseño y la producción por primera vez de un repetidor de minutos automático. Esto se logró a través de un micro-rotor descentrado (inspirado por el Calibre 240, un movimiento muy delgado de Patek Philippe). La principal ventaja de esta solución fue que se dejó el centro del movimiento despejado para el mecanismo del repetidor de minutos, manteniendo así el movimiento aceptablemente delgado y dejando espacio para más complicaciones que habrían de añadirse sin que el reloj acabara por volverse incontrolable. Esto abrió el camino para futuros desarrollos, como el advenimiento solo unos pocos años después de la ref. 3939, un repetidor de minutos tourbillon, que se unió con éxito a la colección principal de la compañía.

Por último, los ingenieros atacaron el formidable tema central de los gongs, el componente clave de un reloj de sonería, la producción de los cuales habían dejado prácticamente en la década de 1960. Mediante la búsqueda de algunos fabricantes de relojes antiguos en la Vallée de Joux que estaban dispuestos a renunciar a una parte de sus secretos (aunque no a todos ...) y al mismo tiempo uniendo fuerzas con el prestigio Instituto de Tecnología de Lausana, el EPFL, para lanzar programas de investigación en metalurgia, Patek Philippe fue capaz de obtener una mejor comprensión de las variables que intervienen en la producción, transmisión y calidad del sonido. Este enfoque científico, haciendo uso de datos de acústica medidos con precisión que pudieran ser interpretados fuera de un gráfico, mejoró significativamente el rendimiento del gong. Finalmente se hizo posible medir variables tales como la intensidad del sonido, el ritmo, la armonía, el tono, la duración, la calidez y la riqueza, tanto como la precisión y la fiabilidad. Sin embargo, la ciencia tiene sus límites, y el factor más importante para una complicación de sonería es que los sonidos que produce se deben complementar perfectamente con su caja. Teniendo en cuenta que cada reloj tiene su propio carácter individual, este no es totalmente predecible, y es por eso que cada reloj de sonería producido por Patek Philippe es aprobado personalmente. En esos días, la responsabilidad es de Thierry Stern, presidente de la compañía quien, después de una serie de ensayos acústicos laboriosos, o bien le da el aprobado al reloj o lo envía de vuelta al taller.

 CAMPANADAS PERPETUAS

En octubre de 2014, para su 175 aniversario, Patek Philippe dio a conocer una colección conmemorativa que incluía el primer reloj de pulsera de la compañía tanto con grande como petite sonnerie, en una edición limitada de siete. El calibre interior, cuya compleja construcción es igualada por su nombre - el GS AL 36-750 QIS FUS IRM - acciona también el nuevo Patek Philippe Grandmaster Chime Ref. 6300, ahora parte de la colección actual de la manufactura. Este reloj es el producto final de todos esos años de investigación, los cuales no sólo permitieron descubrir todo el potencial de las complicaciones de sonido, sino que también condujeron al desarrollo de nuevas soluciones para combinar mecanismos de sonería con otras complicaciones. En cierto sentido, representa la consumación de la paciencia de Patek Philippe y su enfoque riguroso. Sin embargo, la complejidad extrema del reloj no es obstáculo para su uso diario.

La caja de doble cara reversible (activada mediante un ingenioso mecanismo de rotación patentado que es a la vez seguro y muy fácil de usar) enclavado en el encaje del brazalete significa que es posible llevar puesto el reloj con una de estas esferas hacia arriba. La información esencial - horas, minutos y fecha - se muestran en ambas esferas, pero la esfera de color negro ébano opalino está dedicada en gran parte a los diversos modos de sonería, mientras que la esfera de blanco opalino exhibe el calendario perpetuo instantáneo.

CALIBRE GS AL 36-750 QIS SUS IRM CARA DEL TIEMPO (IZQUIERDA)
CALIBRE GS AL 36-750 QIS SUS IRM CARA DEL CALENDARIO (DERECHA)

Por la CARA DEL TIEMPO, el reloj ofrece una sinfonía del tiempo, con grande y petite sonnerie, repetición de minutos, una alarma y un repetidor de fecha que tañe la fecha bajo demanda. dos barriletes dedicados a los modos de sonería proporcionan unas 30 horas de reserva de marcha y garantizan que el reloj continuará tañendo durante todo el día sin necesidad de una recarga manual. La grande sonnerie tañe automáticamente las horas con un tono bajo, y la hora y los cuartos cada cuarto de hora (más que el usual doble tañido). La petite sonnerie hace lo mismo, sin repetir el conteo de las horas en los cuartos de hora.

El repetidor de minutos tañe el tiempo bajo demanda, sonando a las horas, los cuartos de horas y minutos desde el último cuarto. La alarma dispone de una función que hasta ahora no se ha visto en un reloj de pulsera: suena a la hora de alarma con la secuencia melódica completa de la repetición de minutos.

Otra innovación acústica patentada es el repetidor de fecha instantáneo, que se activa mediante un pulsador en el centro de caja. Los decenas están marcados con un doble tono alto-bajo, y las unidades con un tono alto. (Por lo tanto, para el día 25 del mes, sonaría la siguiente secuencia: ding-dong, ding-dong, seguido por ding-ding-ding-ding-ding.)

El lado del tiempo también muestra la hora y los minutos en la hora local, la hora en un segundo huso horario, la hora de alarma, la fecha del calendario perpetuo, las fases de la luna, las reservas de marcha de la sonería y del movimiento, el indicador del modo de sonería, el indicador encendido / apagado de la sonería y la alarma, el indicador de la posición de la corona (empujando en la carga del movimiento en una dirección y el mecanismo de sonería en la otra, extraída hasta la mitad para ajustar la alarma, y todo el recorrido para ajustar la hora). El modo sonería se establece por medio de una pequeña deslizadera a las 9 en punto.

La CARA DEL CALENDARIO ofrece la gama de un calendario perpetuo y que, a excepción del año, todas las indicaciones saltan instantáneamente y al mismo tiempo. Esto significa que la información para el mecanismo patentado del repetidor de fecha es precisa incluso antes o después de la medianoche. Las indicaciones del calendario perpetuo se muestran con agujas en cuatro sub-esferas dispuestas alrededor de la ventana central del año de cuatro cifras. El mes está a las 3 en punto, la fecha y la indicación del año bisiesto están a las 6 en punto, el día está a las 9 en punto y el registro a las 12 en punto, muestra la indicación del tiempo en 24 horas con agujas de horas y minutos Gracias a un mecanismo patentado, el año se puede ajustar fácilmente hacia atrás o hacia hacia adelante mediante dos pulsadores.

 UNA EXCEPCIONAL CAJA PARA UN MOVIMIENTO EXCEPCIONAL

Ingeniería y relojería unieron sus fuerzas para lograr mayor dominio del sonido; ingeniería y artesanía del mismo modo se unieron para crear una caja excepcional. El mecanismo de rotación oculto dentro del encaje del brazalete es quizás el ejemplo más notable. El sistema patentado muy fácil de usar permite que el reloj gire alrededor del eje 12 en punto / 6 en punto y bloquean la considerable caja - 47,4 mm de diámetro y 16,1 mm de espesor - de forma segura en su lugar.

La extraordinaria caja de oro blanco está decorada con un raramente visto guilloché Clous de Paris con patrón tachonado hecho a mano. Este particular y elegante motivo es uno de los diseños icónicos de la compañía, A pesar de que rara vez se ve en los relojes de grandes complicaciones. el motivo tachonado se repite en la esfera negra opalina. Los numerales aplicados y las agujas Breguet en oro blanco y las escalas impresas en blanco aseguran una legibilidad óptima. En la cara del calendario, las cuatro sub-esferas negras con sus negras agujas de acero oxidado se destacan claramente contra la esfera de blanco opalino. El año se muestra en el centro de la esfera, en un discreto marco de oro blanco.

Hay un detalle más que facilita su uso: los pulsadores en el flanco de la caja tienen grabadas etiquetas para explicar sus funciones, y los indicadores de modo en la esfera de negro opalino hacen que sea fácil para el usuario ver qué funciones se activan en un momento dado. Por último, el Patek Philippe Grandmaster Chime Ref. 6300 está montado sobre una correa de piel de cocodrilo negro brillante con grandes escamas cuadradas y costuras de contraste cosidas a mano, que complementan perfectamente el blanco sobre negro / negro sobre blanco de la doble esfera.

Fuente: Europa Star Magazine 4/16 Otoño del 2016