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El Ellipse d’Or de Patek Philippe. La divina proporción

marzo 2009


Por Carles Sapena

Es característico de la manufactura Ginebrina la creación de colecciones intemporales, tal es el caso del legendario Ellipse d´Or del que se ha cumplido el 40 aniversario por lo que la manufactura ha decidido celebrarlo ofreciendo a los amantes de este modelo, por primera vez una versión en platino, presentada en un cofre exclusivo de dos piezas, acompañadas de un set de joyas de complemento de soberbia elegancia.

El Ellipse d'Or de Patek Philippe. La divina proporción El set Ellipse d’Or de Patek Philippe de edición limitada

Ya en 1868, Patek Philippe creó un pequeño reloj joya que figura en los anales como el primer reloj de pulsera suizo. Cien años más tarde, el reloj de pulsera hacía ya tiempo que había desplazado al reloj de bolsillo y los diseñadores ya habían explotado prácticamente todas las formas imaginables. De la forma redonda clásica al rectángulo y al cuadrado, pasando por el triángulo franmaçon, las cajas habían adoptado las geometrías más diversas y parecía que los creadores estuvieran agotando su inspiración. Es entonces cuando la prestigiosa manufactura lanza su Ellipse d’Or, en 1968. Redondeado sin ser redondo, cuadrangular sin ángulos vivos, este reloj absolutamente original representaba la fusión perfecta entre una elipse y un rectángulo. Además, la relación entre el ancho de la caja y su largo era de 1: 1,618033988… Esta cifra no es otra que el célebre «número de oro» también llamado “sección áurea”, una proporción en la que la relación entre los lados mayor y menor es idéntica a la de la suma de los dos lados y el lado mayor. El matemático griego Hipaso de Metaponto fue el primero en calcular esta relación hacia el año 450 a.C. en sus estudios sobre los pentagramas, descubriendo al mismo tiempo los números denominados «irracionales» (dotados de un número infinito de decimales después de la coma). Todo ello puso de manifiesto que numerosas formas que nos parecen particularmente armoniosas en arquitectura o en la naturaleza obedecen a las proporciones del «número de oro». Este último fue rápidamente bautizado con el nombre de «divina proporción » –y se sigue considerando en la actualidad como una de las manifestaciones más fascinantes, tanto de la naturaleza o como de la cultura. Y esta presente de una manera universal en la Ciencia y el Arte desde la mecánica de fluidos y el crecimiento fractal hasta en la pintura y las Artes Visuales a través de la perspectiva y las proporciones compositivas En 1968, Patek Philippe hizo posible por vez primera que la «divina proporción» apareciera en el mundo de la relojería, creando su Ellipse d’Or, llamado así en referencia al «número de oro». Este nuevo reloj no sólo atraía las miradas por la forma inédita de su caja, sino también por su esfera dotada de reflejos de un azul profundo y misterioso. El procedimiento exacto que permite otorgar a la esfera de oro esta tonalidad casi mágica y ese efecto abisal sigue siendo actualmente uno de los secretos mejor guardados de la manufactura es el denominado Or Bleu® En 2008, Ellipse d’Or celebró su 40 aniversario, lo que la sitúa por orden de antigüedad en la segunda colección de la Casa, después del mítico Calatrava.

Un Ellipse d’Or de gran tamaño con caja de platino

Con esta nueva referencia en su extensísimo catálogo, Patek Philippe reintroduce una versión de gran tamaño en su colección Ellipse d’Or, que se propone por vez primera con caja de platino. La versión original del Ellipse d’Or de gran tamaño, muy apreciada por los coleccionistas y amantes de la marca, ha seguido produciéndose desde finales de 1969 hasta principios de 1980. El frío lustre del platino realza la elegancia intemporal e hipnótica de la nueva caja de gran tamaño y de sus «divinas proporciones» y permite satisfacer el ánsia de armonía. El gran formato de la caja (39,50 x 34,50 mm) da una nueva presencia a la esfera de Or Bleu® de 18 quilates que cautiva la mirada por su efecto de profundidad. Modelo de minimalismo, el diseño depurado de la esfera presenta, además de la firma Patek Philippe, doce esbeltos índices de las horas aplicados, a los que hacen eco dos finas manecillas de oro blanco de 18 quilates. Auténtico símbolo de elegancia, el Ellipse d’Or se ha distinguido siempre por su construcción particularmente plana. En el momento de su lanzamiento solamente un mecanismo de cuerda manual era capaz de otorgar una fineza así. Pero desde la introducción a finales de los años 1970 del Calibre Patek Philippe 240, dotado de un minirrotor integrado en la platina (patente Patek Philippe), la posibilidad de otorgar a los relojes automáticos un perfil plano y elegante se hacía realidad. Este minirrotor esta compuesto únicamente por oro de 22 quilates. Y pese a su reducido diámetro, dispone de una masa suficiente para transformar los gestos normales del brazo en energía de carga. Por su precisión y excelencia, el Calibre 240 figura entre los mecanismos más emblemáticos de la manufactura. Muy apreciado por los especialistas y amantes de mecánica relojera, también hace las delicias de los estetas, que se sienten particularmente atraídos por sus acabados Côtes de Genève y sus aristas finamente limadas. No obstante, el poseedor de esta magnifica pieza, no tendrá ocasión de contemplar este bello espectáculo ya que el Ellipse d’Or, según la antigua costumbre, va dotado de un fondo macizo. No obstante, el hecho de saber que este fondo esconde una obra maestra de estética es suficiente para que el placer se mantenga intacto. El nuevo Ellipse d’Or de gran tamaño es de platino y va acompañado de una correa de cocodrilo brillante con cierre de hebilla del mismo metal.

El Ellipse d'Or de Patek Philippe. La divina proporción El Ellipse d’Or de Patek Philippe caballero, dama y Gemelos complemento del set Ellipse d’Or

Un cofre «duo» con un set de dos relojes Ellipse d’Or acompañados de elegantes complementos

Para celebrar esta efeméride de la colección Ellipse d’Or, Patek Philippe ha creado un cofre exclusivo en una edición limitada de 100 ejemplares. Este elegante estuche de madera preciosa presenta dos relojes Ellipse d’Or: una versión de gran tamaño y otra de dimensiones clásicas (35,60 x 31,10 mm). Ambos modelos van dotados de caja de platino, esfera realzada con los reflejos del Or Bleu®, correa de piel de cocodrilo azul y movimiento mecánico de carga automática Calibre 240. Este cofre «duo» está especialmente destinado a todas esas parejas cuya armonía es comparable a la de las proporciones de la caja Ellipse d’Or. En su interior el hombre podrá encontrar un par de gemelos Ellipse d’Or de oro blanco de 18 quilates con centro de Or Bleu®. La mujer, por su parte, descubrirá dentro de un cajón forrado de piel un collar pendentif exclusivo Ellipse d’Or de oro blanco de 18 quilates, engastado con 69 diamantes redondos Top Wesselton Pur, 29 zafiros azules talla plena y un zafiro montado en cabujón. El modelo Ellipse d’Or de platino en su versión gran tamaño así como los gemelos están disponibles individualmente en la colección corriente Patek Philippe. Por el contrario, la versión de dimensiones clásicas y el collar pendentif únicamente se presentan dentro de este cofre 40 aniversario, y no podrán ser vendidos por separado ni integrados en la colección corriente.