Las marcas de relojes que se han unido a la Fondation de la Haute Horlogerie, que promueve la tradición y la innovación a través de la artesanía y la tecnología, son relativamente jóvenes.

La marca Christophe Claret fue establecida en 1989 y tiene una reputación en el campo de las grandes complicaciones, particularmente los repetidores de minutos, con unos impresionantes 60 calibres diferentes a su nombre.

De Bethune fue establecida hace sólo una década, en 2002, pero ya en los anales de la historia de la compañía se incluyen nueve patentes, 17 estrenos mundiales y 15 movimientos propios.

La incorporación de estas dos nuevas marcas eleva el total de miembros de la Fondation de la Haute Horlogerie a 27 marcas:

A. Lange & Söhne, Audemars Piguet, Baume & Mercier, Bovet, Cartier, Chanel, Chopard, Christophe Claret, Corum, De Bethune, Greubel Forsey, Harry Winston, Hermès, Hublot, IWC, Jaeger-LeCoultre, Montblanc, Panerai, Parmigiani, Perrelet, Piaget, Richard Mille, Roger Dubuis, TAG Heuer, Vacheron Constantin, Van Cleef & Arpels, Zenith.