La sabiduría convencional dice que una nueva empresa relojera Suiza no funcionará en un mercado atestado. Y la industria relojera Suiza versa principalmente acerca de la convención.

Ha habido muchos proyectos de relojes mecánicos de puesta en marcha en los últimos años. La razón por la que usted no ha oído hablar de ellos es muy probablemente debido a que nunca despegaron del suelo. Así que aquí tenemos un nuevo grupo tratando de recaudar los fondos para iniciar su propia compañía de relojes. ¡No sólo eso, sino que quieren hacer su propio movimiento en la casa también!

El grupo es impulsado hacia adelante por el Suizo autoproclamado «friki del reloj» y entusisasta del rugby Jonas Nydegger. De alguna manera la conexión entre la dureza del rugby y la precisión de la relojería Suiza no era obvia para mí. He tenido el placer de estrechar las manos de varios maestros relojeros, y es como darle la mano a un cirujano. Si usted no le ha dado la mano a un cirujano, yo puedo asegurar que decir que sus manos son «delicadas» es un eufemismo.

Pero tal vez el espíritu de equipo y la dureza necesaria en el rugby llevarán al equipo a su objetivo. Ellos han estado trabajando en su propio movimiento durante los últimos 7 años, dándole el nombre de la «Accurat Swiss K1». Se supone que tienen la tecnología de regulación de nano recubriminto de silicio, con un sólido rotor de tungsteno y 56 horas de reserva de marcha.

La parte Accurat implica lo que todos esperamos de un reloj: precisión. Precisión Suiza, en este caso. La designación K1 para el movimiento fue elegida debido a que el equipo sabe lo difícil que será lograr su objetivo. Ve el reto que tiene por delante como similar a escalar una de las montañas «K» en la cordillera del Karakorum.

No quiero ser pesimista, pero las personas han perecido en las subidas a las montañas, y la industria han advertido al equipo de que su visión también podría estar en peligro. Así que era una buena razón para que el grupo se desanimase inicialmente sin siquiera entrar en un mercado lleno de gente. Se les dijo que sin ser parte de uno de los grandes grupos de lujo, necesitarían alrededor de 100 millones de francos Suizos para hacer su propio movimiento mecánico. Como resultado, se dirigieron a Kickstarter, que finalmente hizo del proyecto uno de sus "StaffPicks”.

Parte de la razón para el desaliento es que en un mercado de relojes relativamente saturado, a menudo es difícil diferenciar una marca de otra. Por lo general, es donde entra en juego el marketing, para hacer que un producto familiar parezca único. Para las pequeñas empresas de nueva creación como esta, sin embargo, su presupuesto de marketing es sin duda mínimo en comparación con los peces gordos de la industria.

Pero el grupo ya ha logrado encontrar su innovación de valor añadido para diferenciarse un poco. Ellos han patentado un exclusivo diseño de cierre desplegable que pasaría cada prueba que a la industria relojera Suiza se le ocurriera.

Al parecer, el público ahora ha respondido, ya que el proyecto alcanzó su objetivo de financiación. Vamos a ver si eso será suficiente para demostrar que el cinismo es malo. (VJ)